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miércoles, 26 de abril de 2017

SOS ANIMALES DE CAMPANARIO ESTÁ EN CONTRA DEL MALTRATO, LA CRUELDAD Y EL SUFRIMIENTO QUE PADECERÁN LOS SEIS NOVILLOS ELEGIDOS PARA EL ESPECTÁCULO TAURINO DEL PRÓXIMO 30 DE ABRIL EN NUESTRO PUEBLO

“Los bovinos de raza de lidia son rumiantes, y por lo tanto animales que en la escala evolutiva pertenecen al grupo de los no depredadores. Son animales gregarios y por tanto pacíficos en su ambiente natural, salvo que perciban peligro, en cuyo caso, en la mayoría de las ocasiones, tenderán a huir. Si la zona de escape o de fuga, que estos animales tienen perfectamente establecida en su medio natural, es invadida, podrán optar por el ataque como defensa.” (AVATMA)


                     

Los novillos son reses vacunas entre dos y tres años de edad, podemos situar la esperanza de vida media de un toro en torno a los 20 años. Una cifra similar a la de otros animales mamíferos de gran tamaño. Los seis novillos que pisarán la plaza de toros portátil que se intalará en nuestro pueblo serán torturados y morirán habiendo vivido apenas una décima parte de su vida.

Este año, como en años anteriores, en Campanario habrá “Gran Festejo de Rejones”. El rejoneo, desde que el toro o novillo sale hasta su muerte, se divide en tres tercios:

Rejones de castigo

En función de la fuerza o mansedumbre del toro se le clavan dos o tres rejones de castigo (Art. 88.5). Estos serán de un largo total de 1,60 metros y la lanza estará compuesta por un cubillo de seis centímetros de largo y 15 de cuchilla de doble filo para novillos y 18 centímetros para los toros, con un ancho de hoja en ambos casos de 25 milímetros. En la parte superior del cubillo llevará una cruceta de seis centímetros de largo y siete centímetros de diámetro en sentido contrario a la cuchilla del rejón (Art. 67.1). Estas largas dagas permanecen clavadas en el animal el resto de la corrida, cortándole por dentro.




Tercio de banderillas

El rejoneador no puede clavar más de tres farpas o pares de banderillas (Art. 88.5). Las farpas tienen la misma longitud que los rejones, con un arpón de siete centímetros de largo por 16 milímetros de ancho (Art. 67.2). Las banderillas cortas tendrán una longitud de palo de 18 milímetros de diámetro por 20 centímetros de largo con el mismo arpón que las banderillas largas, pudiendo ser de hasta 35 centímetros. Las banderillas rosas consistirán en un cabo de hasta 20 centímetros de largo con un arpón de ocho milímetros de grosor (Art. 67.4).



Rejón de muerte

El rejón de muerte es una espada larga elaborada como rejón. Las medidas legales son un máximo de 1,60 cm de largo, con un cubillo de 10 centímetros, y las hojas de doble filo 60 centímetros para los novillos y 65 para los toros, con 25 milímetros de ancho.

El Presidente es el que ordena el cambio de Tercio y, por lo tanto cuando comienzan los rejones de muerte. El caballista debe haber clavado, al menos, dos rejones de muerte para que pueda echar pie a tierra o intervenir el subalterno (torero que forma parte de la cuadrilla del Matador) para matar al toro. Es decir, pueden clavarse varias de estas espadas en el animal para matarle sin que por ley haya un número máximo (Art.88.5).









Como animalistas no tenemos palabras para expresar la impotencia que sentimos al saber que en nuestro pueblo se utilizarán todos estos instrumentos de tortura taurina contra seis bellos e inocentes animales y no podremos hacer nada para impedirlo y salvarles de un fin tan indigno. Desgraciadamente no podremos evitar ni aliviar el sufrimiento físico y psicológico de estos seis novillos algo que nos entristece profundamente.



Lo que más nos preocupa es que el 30 de abril, en Campanario, se dará fin a la vida de seis animales entre vítores y aplausos de las personas asistentes sin que en esa plaza se demuestre ni una pizca de compasión por estos seres inocentes. Pensamos que la tauromaquia es violencia y nos posicionamos en contra de cualquier tipo de manifestación violenta ya sea contra personas, animales o cosas.






Estamos convencidos y convencidas de que el fin de la tauromaquia está muy cerca y de que llegará el día en el que no tendremos que preocuparnos por el sufrimiento de estos bellos animales, mientras tanto seguiremos mostrando públicamente nuestra repulsa ante un espectáculo tan cruel y denigrante que para colmo es sufragado con el dinero de todas y todos los campanarienses.




Como ha hecho AVATMA analizamos las siguientes definiciones

Maltratar: “Causar daños físico o moral a una personas o animal”.

Crueldad: “Acción que causa sufrimiento y dolor intensos”.

Sufrimiento: “Dolor o padecimiento físico y psíquico”.

Podemos afirmar que los novillos en nuestro pueblo padecerán MALTRATO, CRUELDAD Y SUFRIMIENTO. 





No creemos en tradiciones sanguinarias ni en una cultura ensuciada por la tortura animal y por ello seguiremos luchando para conseguir la abolición de la tauromaquia en todas sus formas.

¿TE APUNTAS? ¡CONTACTA CON NOSOTROS/AS!

"Ni como naturalista ni como biólogo puedo ser partidario de las corridas de toros. Es asombroso que exista un público que disfrute y sienta placer viendo como un hombre mata a un animal en una plaza de toros. La Mal llamada fiesta nacional es la máxima exaltación de la agresividad humana". (Félix Rodríguez de la Fuente). 



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