El pasado 14 de febrero despertamos con una estupenda noticia: el Ayuntamiento emitía una resolución para "prohibir la instalación de atracciones que utilicen animales vivos en la próxima Romería de San Valentín 2015".
Esta resolución se ha hecho en respuesta a un informe que SOS Animales de Campanario había presentado tiempo atrás en el Ayuntamiento, informando de lo inadecuado de este tipo de atracciones en muchos sentidos, y pidiendo que se prohibiesen en nuestra localidad.
De esta noticia se hizo eco el diario Hoy:
La Alcaldía prohíbe la instalación de la atracción de los ponis en San Valentín
La asociación SOS Animales de Campanario se ha congratulado de esta noticia.
NOTICIA DE F. H.14/02/2015
Atracción de los ponis, el año pasado en San Valentín. FOTO: F. H. |
La romería de San Valentín no contará este año con la atracción infantil de los ponis, que si estuvo en los últimos años. Su instalación ha sido prohibida por el Alcalde de Campanario.
En una resolución de Alcaldía fechada en el día de ayer, se indicaba que se habían recogido por parte de Alcaldía diversos comentarios "sobre lo inadecuado de las atracciones para niños que utilizan animales vivos".
Por ello, una vez comentado el tema con la Hermandad de San Valentín y Virgen de la Guía, responsable de la romería, y considerando la legislación actual sobre protección animal, en la que es competente la Alcaldía, se ha decidido prohibir las atracciones que utilicen animales vivos en la romería de San Valentín de Campanario.
La asociación SOS Animales de Campanario, que promueve la defensa animal, se ha congratulado de esta noticia y ha aplaudido la decisión adoptada.
La noticia obtuvo cientos de comentarios en la versión online del periódico Hoy.es y también en facebook. Cientos de comentarios de felicitaciones, de apoyo y también de anhelo, porque mucha gente espera que esta prohibición se haga extensible y llegue a todos los rincones de nuestro país.
También es cierto que algunas personas no entendieron la importancia de esta decisión e incluso se mostraron en contra. Suponemos que esto se debe a simple desinformación, y por eso queremos informaros de la crueldad y el peligro que suponen este tipo de atracciones.
A continuación exponemos algunos de los puntos que se recogían en el informe que SOS Animales de Campanario presentó en el Ayuntamiento. Nuestro informe se basa en diferentes fuentes: denuncias realizadas con anterioridad en diversas localidades españolas e informes de otras asociaciones protectoras de animales y asociaciones de veterinarios, como por ejemplo el Servicio de Cirugía Equina de la Facultad de Veterinaria de
la Universidad de Córdoba (UCO).
En estos informes queda patente que las
atracciones infantiles de ponis suponen un severo sufrimiento físico
y psicológico para estos pequeños equinos, no sólo por las
condiciones de alojamiento, alimentación, transporte y
socialización, sino por el trato que reciben y la explotación a la
que son sometidos. Los ponis son
maltratados y concretamente:
-Padecen jornadas maratonianas (frecuentemente hasta 12 horas) dando vueltas sobre un eje, llegando a alcanzar entre 1500 y 3000 vueltas por día sin parar.
-Los descansos son breves y
rara vez los animales son sustituidos en el mismo día.
-La sujeción al eje por medio
de una barra y el peso de la silla de montar provocan rozaduras y
heridas, lesiones vertebrales y, con el tiempo, dolorosas
desviaciones de columna.
-El roce continuo de sus
pezuñas, incluso con cascos, en superficies duras, les producen
lesiones.
-La
música está muy
alta y cada atracción tiene sus propios altavoces. Se llegan a medir
hasta 130db (equivale a un avión despegando). Esta agresión contra
sus delicados oídos les produce sordera
y estrés.
-Las luces
de las atracciones les puede causar daños e incluso ceguera
parcial.
-En muchas ocasiones, los ponis
de feria no tienen ningún tipo
de control sanitario,
convirtiéndose en un riesgo sanitario real para las personas.
Por otro lado, las
autoridades locales deberían llevar a cabo unas inspecciones
necesarias que comprueben el estado sanitario de estos núcleos
zoológicos.
En estas atracciones estamos poniendo también en riesgo a nuestros niños y niñas, porque en muchas
ocasiones no existe una "limpieza efectiva" de desinfección
durante las horas en las que están en funcionamiento. Además,
algunas de estas atracciones disponen de un suelo de madera no
permeabilizado, por lo que los restos de orines y heces quedan
impregnados en el mismo. Esto supone un peligro para cualquier
persona, especialmente niñ@s, que son l@s usuari@s de estas
atracciones, pues al tropezar y caer irían a parar directos a
numerosas bacterias.
Ponis durante una jornada de feria |
Algunos ponis llegan a morir de agotamiento, como ha sucedido en algunas ocasiones, a la vista de tod@s, incluso de l@s propi@s niñ@s. |
A todas las razones
anteriormente expuestas, tenemos que añadir que las atracciones de
ponis ofrecen una visión de la
realidad distorsionada y antieducativa,
en especial para l@s más pequeñ@s. L@s niñ@s deberían ser
educad@s en el respeto hacia los seres vivos y la naturaleza, y este
tipo de espectáculos no contribuye a esa educación en valores tan
importante en las edades más tempranas, sino que les transmite a l@s
niñ@s la idea de que está permitido divertirse a costa del
sufrimiento de otros seres vivos.
La mayoría de l@s niñ@s no querría hacerlo si
supiera que ese pequeño animal, que produce ternura y aparenta
tranquilidad, lo está pasando muy mal. Si a l@s niñ@s se les
contara la verdad, que están en realidad terriblemente doloridos;
que pasan un calor asfixiante porque pueden pasar horas a pleno sol;
que se sienten angustiados por permanecer atados tanto tiempo; que
son ensordecidos por la música atronadora; que están estresados por
intensas luces intermitentes y por las chillonas atracciones de
alrededor, seguro que no querrían subirse a ellos.
Existen innumerables denuncias de organizaciones de
defensa animal, de particulares e incluso de partidos políticos en
diferentes Comunidades Autónomas, lo que ha conseguido que este tipo
de atracciones estén prohibidas en muchas localidades por toda
España.
En nuestra Comunidad, el Partido Animalista (PACMA)
ha denunciado el uso de ponis en la feria de Cáceres, donde la Ley
5/2002 de Protección de los Animales de la Comunidad Autónoma de
Extremadura no solo prohíbe, en su artículo 2.2.a., “maltratar,
torturar o infligir daños a los animales o someterlos a cualquier
práctica que les pueda producir daños injustificados o la muerte”,
sino “el uso de sistemas destinados a limitar o impedir su
movilidad injustificadamente”, prohibido por su artículo 2.2.c.
Obviamente, permitiendo la instalación de carruseles con ponis, se
está incumpliendo la ley.
Campanario es una de las primeras localidades extremeñas
donde se ha reconocido el sufrimiento de estos animales y se ha dado
un paso al frente para acabar con él, prohibiendo estas
instalaciones en nuestra Romería de San Valentín. Desde SOS
Animales de Campanario lo celebramos y esperamos que esta prohibición
se lleve a cabo en todas las romerías y ferias de nuestro pueblo y
sea definitiva.